1- No siga las dietas según la moda. En general los planes de adelgazamiento no están diseñados para reeducar sus hábitos de alimentación. Haga tres o cuatro comidas diarias importantes, y agregue una o dos colaciones en las horas intermedias.
2- Use grasas y aceites vegetales en poca cantidad. Retire la grasa visible de la carne y la piel del polio antes de cocinarlos. Use aderezos para ensalada de bajas calorías y prefiera los productos lácteos descremados. Abandone las frituras, las comidas rápidas, las tortas y las golosinas.
8- No tome bebidas de alto contenido calórico. Estas no calman la sed más que las de bajas calorías Sólo le aportarán una cuota extra de azúcar que no necesita. Prefiera el agua, mineral o soda, y gaseosas dietéticas. Un vaso de jugo de fruta natural tiene las mismas calorías que las 2 ó 3 frutas que contiene.
9- Trate de mantenerse alejado de las bebidas alcohólicas. El alcohol es potencialmente más peligroso cuando uno hace una dieta de bajas calorías. Tanto la disposición mental como las actividades normales (por ejemplo manejar) pueden alterarse debido a su exceso.
10- Si entra en una "meseta" tenga paciencia. La meseta es una capacidad de adaptación del cuerpo para sobrevivir a situaciones de desnutrición. Sin embargo, también puede experimentarlas alguien que sigue un régimen bajo en calorías durante un tiempo prolongado. Se reconoce porque uno deja de bajar de peso a pesar de hacer correctamente el régimen. Si le sucede, siga más que nunca el plan al pie de la letra.
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2- Use grasas y aceites vegetales en poca cantidad. Retire la grasa visible de la carne y la piel del polio antes de cocinarlos. Use aderezos para ensalada de bajas calorías y prefiera los productos lácteos descremados. Abandone las frituras, las comidas rápidas, las tortas y las golosinas.
3- No hay comida que no pueda comerse ocasionalmente, El problema de los chocolates, tortas y vino es la cantidad. Si se permitió un gusto y se excedió en el límite de calorías permitido por su plan, descuente al día siguiente. Pero hágalo como excepción, no como hábito.
4- Evite en lo posible el azúcar y las comidas con alto contenido de azúcares, como bebidas gaseosas, jugos artificiales, jaleas, dulces, bizcochuelos, tortas y confituras glaseadas. Use edulcorantes artificiales y productos sin agregados de azúcar. Por eso es importante que lea atentamente las etiquetas antes de comprar un producto.
5- Tome un suplemento de vitaminas y minerales a diario. Este punto sería conveniente que lo consulte primero con su médico, sobre todo si usted ha decidido seguir un régimen pobre en calorías. Para que su organismo pueda absorber el máximo de hierro aportado por las comidas principales, espere una hora antes de tomarse un té o un café.
6- Para prevenir la constipación, Coma pan y cereales integrales, fruta fresca y vegetales, Tome suficiente cantidad de agua. Es bueno comenzar el día con un desayuno que incluya copos de cereal inflado y tostadas de pan de salvado.
7- Si come afuera continúe el plan: Coma platos ricos, pero ahórrese las calorías innecesarias. Pida una ensalada de verduras condimentada con aceite de maíz y jugo de limón; coma pickles o verduras crudas mientras espera el plato principal; tome agua mineral y si toma vino procure no excederse de un vaso
9- Trate de mantenerse alejado de las bebidas alcohólicas. El alcohol es potencialmente más peligroso cuando uno hace una dieta de bajas calorías. Tanto la disposición mental como las actividades normales (por ejemplo manejar) pueden alterarse debido a su exceso.
10- Si entra en una "meseta" tenga paciencia. La meseta es una capacidad de adaptación del cuerpo para sobrevivir a situaciones de desnutrición. Sin embargo, también puede experimentarlas alguien que sigue un régimen bajo en calorías durante un tiempo prolongado. Se reconoce porque uno deja de bajar de peso a pesar de hacer correctamente el régimen. Si le sucede, siga más que nunca el plan al pie de la letra.
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